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Gracias Vivi y Cri Cri por llevar a escena esta loca inspiración, y por sobre todo, hacerlo tan bien. Los llevaré siempre en mi mente y en mi corazón.
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Voz 1:…¿A qué vienen jóvenes caminantes? Seguramente es la búsqueda de respuesta lo que los moviliza. El problema (irónicamente) es que el tiempo les dirá que no existe una única respuesta y que incluso la pregunta puede estar mal planteada.
Voz 2: Será acaso que habrá que definir quién es pobre o qué es ser pobre. Algunos como Luis Barrales dirán que pobre es algo que se distingue por el olor.
Voz 1: Dirán que es un olor de pérdida de autoestima...
Voz 2: El olor a pobre es un poco olor a tomates con ajo y pan francés y té Supremo...
Voz 1: El olor a pobre se parece mucho al olor del vino en caja...
Voz 2: El olor a pobre no puede no ser el del huevo duro y una botella de bilz...
Voz 1: Es el olor a mentolatum en el pecho con los bronquios hecho mierda...
Voz 2: Es el olor a plantillas de papel de diario en los zapatos...
Voz 1: Es el olor a papas crudas con vinagre puestas en la frente en las noches de fiebre, peste cristal y paperas...
Voz 2: Es el olor de la ropa de tu hermano que te deja como herencia...
Voz 1: El olor a pobre es olor a jugo yuppie seco en las manos mugrosas...
Voz 2: Es también olor a ray filter en las ñatas en verano...
Voz 1: El olor a pobre es olor a limón en los peinados de cabros chicos...
Voz 2: El olor a pobre es el olor del que se conmueve mirando a Etiopía en Informe Especial y él se siente afortunado...
Voz 1: Es un olor resignado a chavo del 8...
Voz 2: Sin embargo, otros dirán que la pobreza es algo que ocurre en la mente y en el espíritu, y que finalmente darán por sentado que sólo son construcciones sociales y que en realidad nada existe, ni yo, ni ustedes y que tan solo somos experiencias reunidas por un ego inventado.
Voz 1: Deben saber, ya que estamos en esto, que “Latinoamérica” es algo inventado. Sí, no existe tal, y que para algunos somos un montón de indios que corremos descalzos sin entender demasiado la lógica de un mundo que se nos presenta demasiado complicado, para tan débiles mentes.
Voz 2: Pero mmmmmmm…….. ya sé... Y¿ si a ellos les decimos algo parecido pero al revés?, digámosles que sus conceptos son inventados y los mandamos a la cresta con su “eje del mal”. Y que todas sus ideas sobre la libertad significan más esclavitud y hambre, hambre que terminará por devorarlos a ellos mismos...
Voz 1: Pero para qué vamos a ser tan malos... Creo que decirles todas esas cosas o hacerlos sentir todas esas cosas, puede ser demasiado nefasto. Simplemente no están preparados.
Voz 2: Mientras tanto, es necesario salir a la vida y tomar lo más profundo e inefable para ponerlo afuera y trasformar lo que tenemos. Consideremos la muerte a todo aquello que nos dijeron que debía ser, y caminemos por el mundo haciendo el bello barrio que hace un tiempo fue truncado…… Mas para hacer todo aquello, es necesario no morir, sino renacer... Y ese renacimiento, queridos caminantes, empieza aquí y ahora, y será el humo la fuente de iniciación a la nueva vida...
Voz 1: Primero habrá que sanar las relaciones con los más cercanos.
Voz 2: Hombro izquierdo
Voz 1: Luego, el humo mirará tu quehacer hacia los demás. Dones y talentos que deberás desarrollar para el bien común.
Voz 2: Hombro derecho
Voz 1: La penúltima estación será el corazón, la vida misma.
Voz 2: Y todo acabará con la cabeza, lo intelectual.
Voz 1: ¡Vivan de nuevo pasajeros de estas estancias!, pero nunca olviden a los que estuvieron antes que ustedes, y que sin embargo siguen estando...
Voz 2: ¡Cambien!
Voz 1: ¡Cambien!
Voz 2: ¡Cambien lo que ven!
Voz 1: No den por sentado lo cotidiano como algo normal. Nunca olviden que un corazón late en Latinoamérica y que ustedes son parte de él.
Ambas voces: Así como nosotros lo fuimos en algún momento...
Voz 2: Será acaso que habrá que definir quién es pobre o qué es ser pobre. Algunos como Luis Barrales dirán que pobre es algo que se distingue por el olor.
Voz 1: Dirán que es un olor de pérdida de autoestima...
Voz 2: El olor a pobre es un poco olor a tomates con ajo y pan francés y té Supremo...
Voz 1: El olor a pobre se parece mucho al olor del vino en caja...
Voz 2: El olor a pobre no puede no ser el del huevo duro y una botella de bilz...
Voz 1: Es el olor a mentolatum en el pecho con los bronquios hecho mierda...
Voz 2: Es el olor a plantillas de papel de diario en los zapatos...
Voz 1: Es el olor a papas crudas con vinagre puestas en la frente en las noches de fiebre, peste cristal y paperas...
Voz 2: Es el olor de la ropa de tu hermano que te deja como herencia...
Voz 1: El olor a pobre es olor a jugo yuppie seco en las manos mugrosas...
Voz 2: Es también olor a ray filter en las ñatas en verano...
Voz 1: El olor a pobre es olor a limón en los peinados de cabros chicos...
Voz 2: El olor a pobre es el olor del que se conmueve mirando a Etiopía en Informe Especial y él se siente afortunado...
Voz 1: Es un olor resignado a chavo del 8...
Voz 2: Sin embargo, otros dirán que la pobreza es algo que ocurre en la mente y en el espíritu, y que finalmente darán por sentado que sólo son construcciones sociales y que en realidad nada existe, ni yo, ni ustedes y que tan solo somos experiencias reunidas por un ego inventado.
Voz 1: Deben saber, ya que estamos en esto, que “Latinoamérica” es algo inventado. Sí, no existe tal, y que para algunos somos un montón de indios que corremos descalzos sin entender demasiado la lógica de un mundo que se nos presenta demasiado complicado, para tan débiles mentes.
Voz 2: Pero mmmmmmm…….. ya sé... Y¿ si a ellos les decimos algo parecido pero al revés?, digámosles que sus conceptos son inventados y los mandamos a la cresta con su “eje del mal”. Y que todas sus ideas sobre la libertad significan más esclavitud y hambre, hambre que terminará por devorarlos a ellos mismos...
Voz 1: Pero para qué vamos a ser tan malos... Creo que decirles todas esas cosas o hacerlos sentir todas esas cosas, puede ser demasiado nefasto. Simplemente no están preparados.
Voz 2: Mientras tanto, es necesario salir a la vida y tomar lo más profundo e inefable para ponerlo afuera y trasformar lo que tenemos. Consideremos la muerte a todo aquello que nos dijeron que debía ser, y caminemos por el mundo haciendo el bello barrio que hace un tiempo fue truncado…… Mas para hacer todo aquello, es necesario no morir, sino renacer... Y ese renacimiento, queridos caminantes, empieza aquí y ahora, y será el humo la fuente de iniciación a la nueva vida...
Voz 1: Primero habrá que sanar las relaciones con los más cercanos.
Voz 2: Hombro izquierdo
Voz 1: Luego, el humo mirará tu quehacer hacia los demás. Dones y talentos que deberás desarrollar para el bien común.
Voz 2: Hombro derecho
Voz 1: La penúltima estación será el corazón, la vida misma.
Voz 2: Y todo acabará con la cabeza, lo intelectual.
Voz 1: ¡Vivan de nuevo pasajeros de estas estancias!, pero nunca olviden a los que estuvieron antes que ustedes, y que sin embargo siguen estando...
Voz 2: ¡Cambien!
Voz 1: ¡Cambien!
Voz 2: ¡Cambien lo que ven!
Voz 1: No den por sentado lo cotidiano como algo normal. Nunca olviden que un corazón late en Latinoamérica y que ustedes son parte de él.
Ambas voces: Así como nosotros lo fuimos en algún momento...
